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The Problem With Conspiracy Theories

Conspiracy theories speckle my newsfeeds.

After all, the powerful alliances that call the shots in this world have not been short on giving us reasons to distrust them.

But God’s words to Isaiah stop me in my clicks and scrolls: “Do not call conspiracy everything this people calls a conspiracy. Do not fear what they fear, and do not dread it” (Isaiah 8:12).

Why? The reason is in the very next sentence: “The LORD Almighty is the one you are to regard as holy.”

Because God has given us *every* reason to trust *Him*.

Regardless of circumstances.

The torch of trust many of us hold in our hearts today was passed onto us through faithful men and women who trusted Him through famines, wars, and shocking revelations of corruption.

Who persevered in keeping their focus on Him and living out His rule in the opportunities that presented themselves in the context of their normal lives.

These were people who put their trust in Jesus even while following the apostles’ direction to honor and submit to tyrants like Nero and Diocletian.

How powerless they must have felt. How tangled those endless webs of rumors of conspiratorial alliances must have spun around them and begged for attention.

Or then, again, maybe not.

Maybe this is when the power of God came into greatest focus.

And they let Jesus gently, yet shrewdly, lead them into previously concealed paths of faithfulness.

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Teorías de conspiración salpican mis noticias.

Después de todo, todos los aliados poderosos que toman devociones en este mundo no sean quedado cortos en darnos razones suficientes para desconfiar en ellos.

Sin embargo, las palabras de Dios a Isaías me detienen antes de hacer “click” o continuar leyendo: “No llames conspiración a todo lo que este pueblo llama conspiración. No temas a lo que ellos temen, no tengas miedo” (Isaías 8:12).

Porque? La razón está en la siguiente frase: “El Señor todo poderoso es a quien debes tener como santo.”

Porque Dios nos ah dado a *cada uno* razón para confiar *en él*.

Muy a pesar de las circunstancias.

La antorcha de confianza que muchos de nosotros sostenemos en nuestros corazones hoy, nos fue pasada a través de hombres y mujeres fieles quienes confiaron en Él a través de hambrunas, guerras e impactantes revelaciones de corrupción.

Quienes perseveraron en mantener su enfoque en Él y vivieron su reinado en las oportunidades que se les presentaron durante el contexto de sus vidas normales.
Estás fiero. Personas quienes pusieron su confianza en Jesús aún siguiendo las ordenanzas de los apóstoles de honrar y someterse a tiranos como Nero y Diocleciano.

Que sensación de impotencia debieron haber sentido. Que enredadas y tan necesitadas de atención debieron haber sido esas telarañas interminables de rumores de conspiraciones y alianzas.

Oh, tal vez, no.

Tal vez allí es a donde e poder de Dios vino a ser su mayor enfoque.

Y ellos dejaron a Jesús gentil y perspicaz mente les guiara a través de caminos de fidelidad previamente ocultos.

(Special thanks to Jahzeel Chavez for gifting me with this translation!)

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